Estamos inmersos en una crisis civilizatoria que afecta a todo el planeta, donde son los grupos sociales más vulnerables y los pueblos del Sur los que están soportando la carga más pesada. Mientras millones de trabajadoras y trabajadores han perdido su trabajo, sumiendose en la pobreza y precariedad, el sistema financiero obtiene ganancias multibillonarias con el apoyo de los Estados del Norte.
La crisis económica mundial está lejos de ser resuelta y los planes de rescate se han dirigido a defender los intereses del gran capital, como lo demuestran las recientes medidas de ajuste estructural exigidas a Grecia por parte de la UE, y los anuncios en la misma dirección por parte de España y Portugal. La historia de América Latina y el Caribe demuestra el impacto devastador de estas políticas de recorte del gasto público, privatizaciones y desregulación económica.
Pues sí … Los pueblos, la gente, de alguna u otra manera siguen agenciando no solo resistencias y protestas, sino oposiciones manifiestas. El enemigo es el neoliberalismo, con sus imposiciones pretendidas. Eso se siente y se vive a diario. No es algo abstracto, algo de tesis o disertaciones académicas, ni es asunto de programas políticos “correctos” y sancionados de derecha o izquierda, sino que eso del neoliberalismo es algo cotidiano que busca imponer y asegurar su presencia fuerte y persistente. No es algo que se pueda criticar desde el punto de vista de las vanguardias pretendidas y pretenciosas, sino que tendencialmente queda ahora esa oposición en manos de la gente que se cansa y decide que ya no se puede seguir aceptando lo que se quiere seguir imponiendo desde arriba para beneficio de los pocos, para beneficio de los capitales neoliberales y de sus asociados y representantes de Estado (y de sus gobiernos).
Eso lo vemos ahora en Puerto Rico, en la huelga de l@s universitari@s. Lo que aparece más claramente en estos momentos, en ese movimiento de lucha que se sigue potenciando, es el reconocimiento de que el problema no es el presupuesto asignado al sistema universitario (que pretende desmantelar el sistema, como parte del gran plan neoliberal del gobierno de turno), sino que los efectos del presupuesto asignado al sistema universitario son parte de una lógica neoliberal que pretende imponer limitaciones cotidianas (a la gente) para satisfacer otras necesidades, las del neoliberalismo como gobierno descarado y de rapiña. Lo que está en juego es el sistema de escolarización pública, y eso a su vez es parte de toda una estrategia de “desarrollo” (de acumulación del capital neoliberal, y del gobierno que requiere) que pretende subordinarlo todo a las necesidades inmediatas de ese capital, cueste lo que le cueste a la gente. El desmantelamiento de los servicios estatales que se imponen como parte de una supuesta reconstrucción fiscal (¿para quién?) son parte del mismo proceso. La gente no importa, pues somos siempre poblaciones desechables en función de los intereses de esos capitales neoliberales. Los de arriba siguen arriba.
L@s universitari@s se han convertido en punta de lanza posible en Puerto Rico, en contra de ese plan que solo es necesario para el neoliberalismo. En su revuelta recogen a su manera, y condensan, una representación alternativa y amplia desde abajo, con todas sus incertidumbres y con todas sus potencialidades que se dan a diario en todo lo que hacen. El apoyo que reciben ha sido y sigue siendo amplio y persistente, y ello es indicación de muchos descontentos, y de mucha solidaridad repleta de desafíos. Eso lo vemos cada día. Ponen en jaque la impermeabilidad arrogante y desmedida del gobierno de turno que ya busca carnadas, ilusiones de concesiones. L@s universitari@as, l@s estudiantes, han logrado eso en estos momentos. Pero no basta. Apenas es un comienzo posible.
El presupuesto universitario y sus efectos inmediatos no son el problema, sino el síntoma. La revuelta universitaria, y lo que tiende a aglutinar en estos momentos, son una gran esperanza, esperanza de lo que se puede hacer mientras se camina cuando se decide caminar, pero no es todavía solución. Esto es grieta muy importante y sin precedentes. Pero si no se logra una presencia ampliada, múltiple y sostenida, de todos los sectores afectados, que arranque un viraje inicial de las políticas neoliberales actuales, estamos en el umbral de una derrota.
Esto, ahora, es comienzo posible de alternativas. Las “condiciones” para que tal evento posible suceda no se esperan, ni se crean ni planifican, sino que se aprovechan y desarrollan cuando irrumpen las revueltas. Esa sí que es la gran lección de l@s universitari@s, en estos momentos que fluyen con tanta rapidez. Hay que aprovechar esa lección magistral, y eso lo sabe y lo teme el Estado y su gobierno. Puede que no lo reconozcan todos desde abajo, o que algunos no puedan aceptarlo por lo que implica y requiere para muchas organizaciones (y gente), pero la suerte de todos se juega en este proceso, en esta revuelta. El “apoyo” no basta. Todos andamos juntos en esto. Qué lástima, qué trágico sería no lanzarse en ese oleaje. Eso se percibe y se siente. Ya veremos.
Entonces, desde Madrid nos recuerdan, con sus encuentros, manifiestos y declaraciones, lo que todos sospechamos que tenemos que hacer. En Puerto Rico nos recuerdan ahora cómo es que ocurre en sus inicios posibles, en este momento y en ese lugar, si acaso se aprovecha esta revuelta para que llegue a ser otra cosa. Todos somos parte de lo mismo.
Ya veremos, dijo el ciego. Suerte les deseo, y voluntad colectiva de luchas lúcidas. Eso se conquista, paso a paso. Eso es lucha, en todos los sentidos posibles. Esto es un gran tranque. Para salir de eso hacen falta otro juego, otra mesa y otras fichas.
http://www.enlazandoalternativas.org/spip.php?article677
Enlazando Alternativas 4 (Madrid, mayo 2010) / Presidencia española de la Unión Europea (1er semestre 2010)
Declaración final de la Cumbre de los Pueblos “Enlazando Alternativas IV“Las redes, plataformas y organizaciones de Europa y América Latina y el Caribe, reunidas en Madrid del 14 al 18 de mayo, durante la Cumbre de los Pueblos Enlazando Alternativas IV, reivindicamos nuestro derecho a plantear alternativas al modelo neoliberal y a los tratados de libre comercio, y creemos en nuestra capacidad para construir un dialogo político y social entre los pueblos.
Estamos inmersos en una crisis civilizatoria que afecta a todo el planeta, donde son los grupos sociales más vulnerables y los pueblos del Sur los que están soportando la carga más pesada. Mientras millones de trabajadoras y trabajadores han perdido su trabajo, sumiendose en la pobreza y precariedad, el sistema financiero obtiene ganancias multibillonarias con el apoyo de los Estados del Norte.
La crisis económica mundial está lejos de ser resuelta y los planes de rescate se han dirigido a defender los intereses del gran capital, como lo demuestran las recientes medidas de ajuste estructural exigidas a Grecia por parte de la UE, y los anuncios en la misma dirección por parte de España y Portugal. La historia de América Latina y el Caribe demuestra el impacto devastador de estas políticas de recorte del gasto público, privatizaciones y desregulación económica.
Justo cuando se cumplen dos siglos del inicio de las luchas de independencia en varios países de América Latina y el Caribe, la UE propone una “alianza” estratégica que supone volver al pasado. La creación de una « Zona Euro-Latinoamericana de Asociación Global Interregional », sustentada en la aprobación de una serie de acuerdos de libre comercio para proteger los intereses de las multinacionales europeas en América Latina y el Caribe y cercenar las posibilidades de una integración regional y birregional sobre nuevas bases.
En América Latina y el Caribe han surgido varios gobiernos progresistas y de izquierda sensibles a las exigencias de los movimientos populares, que buscan caminos alternativos de desarrollo más acordes con sus realidades locales, y defienden su soberanía nacional. La derecha mundial, al tiempo que intenta desprestigiar y desestabilizar esos gobiernos, sigue predicando políticas de corte neoliberal que han sido promovidas por multinacionales europeas –en particular españolas dentro de América Latina y el Caribe–, y que cuentan con el apoyo de la UE. Estrategias como la “Europa Global : Competir en el Mundo” y “Europa 2020” van a seguir generando elevados costos sociales y agravando las desigualdades entre Estados y al interior de cada país.
En Europa, con el Tratado de Lisboa se ha reforzado un modelo de integración antidemocrático y capitalista. La privatización de los servicios públicos junto a la vulneración de los derechos sociales y laborales consolida la Europa Fortaleza, de carácter militar, represivo y excluyente, en detrimento de la Europa Social.
Ante estas realidades la organización, la resistencia, la dignidad, la solidaridad y la movilización social son y serán factores esenciales para sostener los logros América Latina y el Caribeanzados, impedir una vuelta al pasado, y conquistar nuevos avances tanto en América Latina y el Caribe como en Europa. Nuestra estrategia de lucha y resistencia común se basa en la solidaridad entre nuestros pueblos, para la construcción de una sociedad en la cual los derechos económicos, políticos, laborales, sindicales, sociales, culturales y ambientales sean la prioridad y razón de ser de las políticas gubernamentales.
En este sentido :
1. Rechazamos enérgicamente los Tratados de Libre Comercio, los Acuerdos de Asociación (AdAs) y los tratados bilaterales de inversión (TBIs) –o Acuerdos de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones (APPRIs)– pactados entre algunos gobiernos latinoamericanos y europeos, que han sido negociados a espaldas y en contra de los intereses de nuestros pueblos. En particular, rechazamosel Acuerdo de Asociaciòn UE Cariforum, la firma de tratados con Colombia, Perú y Centroamérica y la reanudación de negociaciones con el Mercosur.
2. Rechazamos que la cooperación al desarrollo forme parte de estos acuerdos al servicio de intereses económicos privados. Queremos una cooperación que fortalezca la capacidad de los actores sociales y de los Estados para diseñar e implementar políticas que apunten a combatir la injusticia social.
3. Rechazamos la implementación de planes de ajuste estructural e intervención del FMI en los países de Europa y América Latina y el Caribe para hacer frente a la crisis económica. Reivindicamos la moratoria inmediata sobre el pago de la deuda publica y la realización de auditorias para la cancelación de deudas ilegitimas.
4. Continuaremos buscando soluciones reales a la crisis ambiental y climática, basadas en la justicia climática y en la necesidad de cambiar el sistema, que produce la destrucción del planeta. Para frenar el cambio climático es necesario que la UE reduzca sustancialmente sus emisiones de gases de efecto invernadero a nivel domestico. Reclamamos a los gobiernos europeos que paguen las deudas ecológicas que acumulan con los pueblos del sur, incluida América Latina y el Caribe, para el financiamiento de la mitigación y sobrevivencia al cambio climático. Ante el fracaso de la Cumbre sobre el Clima de Copenhague, nos comprometemos a implementar las propuestas acordadas en la “Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra”, celebrada en Cochabamba en Abril 2010, como por ejemplo la creación de un tribunal de justicia climática.
5. Apoyamos a todas luchas de los movimientos campesinos de América Latina y el Caribe y Europa por la Soberanía Alimentaria de los Pueblos, la reforma agraria, contra los transgénicos y en defensa de sus territorios. La agricultura campesina, familiar y de pequeña escala alimenta a los pueblos y enfría el planeta.
6. Mantendremos nuestra lucha en favor de la democracia participativa, directa y plural, y nos opondremos a los intentos de coartarla. Apoyamos las luchas contra la impunidad y por la justicia para las víctimas de los genocidios. Rechazamos la criminalización de la protesta social.
7. Exigimos la ruptura de relaciones diplomáticas y financieras con el gobierno de Porfirio Lobo en Honduras, rechazado por varios gobiernos. Dicho Gobierno es proveniente de un golpe de Estado, elegido en condiciones antidemocráticas, sostenido a costa de la represión a los movimientos sociales y la violación de los derechos humanos. Apoyamos la lucha del frente de Resistencia Popular de Honduras y su lucha por una asamblea constituyente.
8. Rechazamos la militarización y la visiòn que desconoce la capacidad del pueblo haitiano para definir su propio destino, con el pretexto de la ayuda humanitaria. Exigimos el respeto a la soberanía del pueblo haitiano, la anulación de la deuda externa de ese país, y el pago de reparaciones.
8. Exigimos a la UE la derogación de la Posición Común contra Cuba.
9. Acusamos a la UE, a sus instituciones y a sus gobiernos de flagrante complicidad en la violación de los derechos humanos, por ejemplo en Colombia, Honduras, Perú, Guatemala y México, países donde dirigentes sociales son asesinados cotidianamente y la protesta social es reprimida.
10. Repudiamos las políticas que aplica la UE en materia de inmigración, porque amenazan gravemente la democracia y la paz entre nuestros pueblos al fomentar la xenofobia y el racismo. Participamos y apoyamos las luchas de los movimientos y redes de migrantes contra la Europa Fortaleza, con sus campos de internamiento para extranjeros (CIE) y su “Directiva del Retorno” justamente llamada “Directiva de la Vergüenza”. Esta política migratoria representa la otra cara de la Europa del Capital.
11. Denunciamos la militarización de nuestros continentes y, en particular, el carácter belicista del gobierno de Colombia. La instalación de 7 bases militares de los Estados Unidos en este país representa una amenaza a la paz y estabilidad de la región. Reiteramos nuestra condena a la política belicista de la UE en Afganistán bajo la egide de la OTAN, así como el uso de millonarios recursos para sostener una maquinaria de guerra que podrían emplearse para otras prioridades de carácter social.
12. Apoyamos la lucha del pueblo griego en la defensa de sus derechos, que representan los derechos de todos los pueblos europeos.
13. Nos comprometemos a trabajar para consolidar un espacio político de solidaridad -en la que participan una diversidad amplísima de movimientos sociales y políticos- que abogan por una integración social, económica, de género, política, ambiental y cultural, y que sea alternativa a la que propone la Unión Europea (UE) y varios de los gobiernos de América Latina y el Caribe.
14. Nos comprometemos a fortalecer y consolidar nuestras luchas frente al poder corporativo y a abrir una nueva etapa de trabajo de la Red Enlazando Alternativas hacia la constitución de un instrumento internacional vinculante para juzgar crímenes económicos. La sesión del Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP), “La Union Europea y las Transnacionales en America Latina. Politicas Instrumentos y actores” ha contribuido a este propósito.
15. Apoyamos y formamos parte de las luchas que libran las comunidades afroddescendietnes, las mujeres, los jovenes y los excluidos de la Amèrica Latina y Europa, que estàn sufriendo los efectos de la crisis con mayor dureza.
16.Hacemos nuestras las luchas y reivindicaciones de los pueblos originarios y por el buen vivir, la creación de estados plurinacionales y el reconocimiento y defensa de los derechos de la madre tierra, que contribuyen a la necesidad de desarrollar modos de consumo y producción que son sostenibles, responsables y justos.
17. Saludamos los compromisos de los gobiernos de América Latina y el Caribe para romper con siglos de dependencia económica, el saqueo de los recursos naturales y la expoliación de los territorios.
18. Llamamos a los pueblos europeos a levantarse para construir otra Europa. Agradecemos a las y los integrantes de los colectivos del Estado español su esfuerzo y ayuda para la realización de nuestra Cumbre de los Pueblos Enlazando Alternativas IV, y damos la bienvenida a las compañeras y compañeros que desde ya están dispuestos a iniciar los preparativos para la Quinta Cumbre de los Pueblos Enlazando Alternativas a realizarse en 2012.
Dedicamos esta Cumbre de los Pueblos a la memoria de la activista indígena Betty Cariño, quien fue asesinada en Oaxaca (México), el 27 de abril, por su labor contra las transnacionales mineras. Hacemos este homenaje en representación de todas las personas asesinadas a causa de su lucha social y política, y a todas las vìctimas del modelo neoliberal injusto y excluyente en América Latina, el Caribe y Europa
Madrid, 16 de mayo de 2010
Cumbre de los Pueblos Enlazando Alternativas IV